domingo, 26 de mayo de 2013

Problemas por adiccion

Jim Morrison se había mudado a Paris con su compañera Pamela Courson en marzo de 1971. Según explica All Music Guide, al principio Morrison era un cantante principal tímido, que muchas veces daba la espalda al público o miraba hacia el suelo. Sin embargo, pronto se sobrepuso a su temor escénico, utilizando su micrófono y presencia en el escenario. Los conciertos de los Doors comenzaron a ser caracterizadas por los sugerentes movimientos de Morrison en el escenario, y “los excesos hedonistas de Morrison ponían la estabilidad de la banda en peligro.”
El arresto de Morrison por obscenidad pública luego de exponerse en un concierto en Miami en 1969, y el juicio de dos meses que siguió, encontrandolo culpable, acabaron con las finanzas y la moral de los Doors.

En Paris, Morrison quería empezar de nuevo. Sin embargo, “sin el apoyo de sus compañeros de banda, Morrison se salió de control.” Morrison cayó en mayores adicciones, subiendo tanto de peso que muchas personas no lo reconocían. Sus diarios personales incluían poesía y letras de canciones, pero también anotaciones repetidas de la frase “Dios me ayude.”

Morrison fue criado autoritariamente por su padre, un almirante de la Armada de los Estados Unidos, y la rebelión se convirtió en su sello. “Sus canciones estaban dominadas por un deseo de violencia, sexo, alcohol, drogas, auto-destrucción, cualquier cosa prohibida por cualquier razón por la autoridad de la América media conservadora,” explica All Music Guide,” e intentaba vivir ese estilo de vida lo mejor que podía.”

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